A 1.850 metros de altitud, y en la cara italiana del Mont Blanc, se encuentra La Rosiere. Se trata de un complejo franco-italiano en el parque nacional de la Vanoise, en el valle de Tarentaise, un lugar idílico que se sitúa, cada año, entre las diez estaciones de esquí francesas donde más nieva.
Actualmente, el Espace San Bernardo es la única zona de esquí franco-italiana de los Alpes del norte. Y su situación, a menos de cinco horas de París, la convierten en un destino perfecto para las vacaciones.
La Rosiere ofrece pistas para todos los niveles
La Rosiere ofrece pistas para todos los niveles: desde los más expertos, que encontrarán los descensos más exigentes en las pistas del Mont Valaisan (cota 2.800 metros), hasta pistas más sencillas y pistas temáticas para los más pequeños. En total, 93 pistas con 39 remontes.
La Rosiere responde al perfil de estación familiar. Aunque fundamentalmente enfocada al esquí alpino, desde 2015 cuenta con tres senderos permanentes para la práctica del esquí de travesía: The Stoat’s Trail, Serge’s Trail y El Roc Trail.
Además, La Rosière cuenta con 6 kilómetros de pistas señalizadas y mantenidas para los amantes del patinaje y del esquí de fondo alternativo. Ello, sin olvidar la posibilidad de disfrutar de actividades como el snowkite, los trineos monorraíl, el paret o el snakegliss.
Experiencias para el aprèski
Disfrutar de una noche bajo un iglú gigante de 180 metros cuadrados; aprender a buscar víctimas de avalancha en el DVA Park, disfrutar de un circuito exclusivo de cinco kilómetros de carrera permanente que permite entrenar sobre la nieve y una atractiva oferta termal son otras de las razones para elegir La Rosiere, que cuenta, además, con una red de alojamientos a pie de pista que dan respuesta a todas las necesidades.
