jueves, abril 18, 2024
InicioEsquiar en el Pirineo AragonésAstúnAprès ski en la Jacetania: un plan diferente.

Après ski en la Jacetania: un plan diferente.

APRÊS SKI. Aspecto de Jaca en temporada alta.
APRÈS SKI. Aspecto de Jaca en temporada alta.

El après ski determina, cada vez más, la elección del destino. Y es que ya no se trata sólo de practicar nuestro deporte favorito, si no que el esquiador busca algo más. Ya no es suficiente un local de referencia, donde comentar la jornada de esquí con los descansos. El après ski ha evolucionado y hoy aporta mucho más.

Après ski en modo cultural, gatronómico y deportivo, la nota diferenciadora de Astún y Candanchú

Es lo que sucede en las estaciones de Astún y Candanchú. El après ski en estas dos estaciones de la comarca aragonesa de la Jacetania ha estado muy ligado a los pueblos cercanos. Especialmente, a Jaca y al Valle del Aragón. Una agenda gastronómica, cultural y deportiva es el mejor plan para disfrutar después de esquiar. Mucho más, si se trata de un après ski adaptado a todos los gustos y bolsillos.

¿Qué hacer en Jaca?

En Jaca, tomar unas tapas al acabar de esquiar resulta de lo más reconfortante. La Tasca de Ana y La Lola son lugares de culto. La Casa de la Montaña es indispensable en la agenda. Y las propuestas del Gorbea, el Pirulo o la Campanilla cuentan con un gran prestigio. También se agradece un chocolate caliente en las míticas cafeterías Astún o Equiza, donde habitualmente se suelen reunir los esquiadores al terminar la jornada. Y, en cuanto a restauración, están La Cocina Aragonesa, el Lilium o el Biarritz. Estos locales se han hecho con un lugar privilegiado en la agenda del après ski por su buen hacer durante años.

En el Valle del Aragón y la Comarca de la Jacetania se cuentan hasta 56 establecimientos hoteleros. Son más de 3.500 plazas de alojamiento que, en temporada alta, condicionan la oferta de actividades para los clientes. Cada uno de estos alojamientos, muy enfocados a la temporada de esquí y al mundo de la nieve, ha sabido especializarse: desde la cocina hasta otras ofertas. Por ejemplo, programas de termalismo o spa conforman una interesante oferta adaptada a todas las necesidades.

APRÈS SKI. Imagen de Astún.
APRÈS SKI. Imagen de Astún.

A pie de pistas

En los últimos años, el esfuerzo de Astún y Candanchú por responder a las expectativas más exigentes ha dado sus frutos: Astún ofrece cinco establecimientos en las mismas pistas. El más alto de ellos, en cota 2.150. Henri Abelé Lounge, Midi Terraza, Snack Bar Ibones, Bocatería Sarrios y La Moleta completan la oferta gastronómica de la estación. Sin dejar de lado las numerosas propuestas de la urbanización que alberga el centro invernal. Aquí se puede conocer mejor la estación: https://www.planesqui.com/Estacion/Astun/AST

En cuanto a Candanchú, también cuenta con un plano gastronómico muy completo, que permite organizar el après ski en función de las preferencias de cada uno. A cota 1.800 está El Tobazo, un establecimiento de comida rápida con el valor añadido de sus incoparbales vistas del Midi D’Ossau y del Aspe. La Tuca, ya en cota 2.000, permite recuperar fuerzas. Para los más exigentes está el Txoko Henri Abelé, y el clásico de Candanchú, renovada recientemente y que tiene una visita obligada: la cafetería de Pista Grande, con su terraza de 300 metros (https://www.planesqui.com/Estacion/Candanchu/CAN).

APRÈS SKI. Hockey en Jaca.
APRÈS SKI. Hockey en Jaca.

Público familiar

Astún y Candanchú son estaciones tradicionalmente más enfocadas al público familiar. Por eso, su après ski no se limita a pasar un buen rato en un pub o una discoteca. Aunque, por supuesto, también se puede hacer.

Visitas a la Catedral, la Ciudadela de Jaca o al Monasterio de San Juan de la Peña forman parte de este après ski que escapa un poco de lo habitual. La Estación Internacional de Canfranc, o los Valles de Ansó y Hecho son otra opción. También se pueden practicar deportes como el patinaje o el hockey sobre hielo. O, incluso, el vuelo sin motor.

En el caso de Candanchú o Astún, el après ski viene marcado por el hecho de que, en apenas 50 kilómetros, se puede hacer absolutamente de todo. Incluso, en menos de 15 minutos, cruzar a Francia y conocer una cultura diferente. Un après ski que se ha convertido en una seña de identidad de estas estaciones del Pirineo Aragonés.

 

 

 

Dejar respuesta

Por favor dejar tu comentario!
Por favor coloca tu nombre

spot_img

Más Populares.

Comentarios recientes.